Exactamente hoy hace 6 meses tuve que irme de mi país, de mi Venezuela.
Y digo “tuve” porque simplemente no fue algo que quise hacer, fue una decisión
que me tomo años ejecutar. Pero que al fin y al cabo tuve que tomar, por el
lamentable hecho de que el gobierno no me iba a permitir forjar mi futuro. Ese
futuro que todos queremos y soñamos desde niños.
Siempre imagine lo que sería vivir lejos de casa y de mi familia. Solo
con la diferencia de que pensaba que iba a hacer eso en mi país. Hoy más que
nunca extraño todo, mi casa, mis amigos, mi familia, mi comida, mi habitación,
mi gente, mis problemas tontos del día a día.
Lamentablemente, todos nos vamos por la misma razón, porque estamos
cansados de sobrevivir diariamente a la inseguridad y a la falta de lo básico
de todo. Porque a los 22 años quiero fastidiarme en una cola para entrar a un
concierto o a una discoteca, no a comprarle leche a mi sobrina o papel
sanitario para mi casa. Porque quería que mi mayor problema fuera que me pelee
con mi novio y no que me acaban de robar en la esquina de mi casa 3 ladrones
armados. Porque ya no quiero que todos mis amigos estén emigrando a países
distintos y que junto a ellos emigren todos nuestros sueños de un futuro y vida
juntos.
Que terrible es que un pequeño grupo de personas sean las encargadas de
separar familias enteras; de llenarnos de ansiedad, de angustia y de tristeza
que ciertamente nos embarga a todos los que estamos afuera y nos enteramos de
las tristes noticias de nuestro país, sobre todo cuando tienes a tus seres más
queridos aprisionados a el.
Ya me cansé de leer diariamente artículos como: "Cosas que los
venezolanos emigrantes extrañan", "10 Cosas que cambian para un
venezolano fuera del país" o "Así son los venezolanos en el
exterior". También me cansé de tratar de ponerle el pecho a la situación y
entusiasmarme con la idea de que iba a poder a lograr algo en mi país. Y con
lágrimas en los ojos me tuve que empacar 21 años en 1 maleta…
Más allá de las dificultades que vive a diario mi país, lo extraño y
necesito todo de el. Y mi sueño más grande es volver, que todos estemos unidos
otra vez, que las reuniones entre amigos y familia sean nuevamente parte de mis
días. Porque yo sigo creyendo que esto es temporario y que volveré a casa, a la
tierra que me vio crecer y que con orgullo me formo en lo que soy. Porque como
leí hace tiempo "tu ausencia me mata". Porque AMO decir que soy
venezolana y me enorgullece mi patria. Por eso mismo pido que el "mejor
futuro" que sueño, sea en Venezuela.
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